Saber qué partes forman una pulidora podría ayudarnos a manipular mejor una de las herramientas eléctricas de uso básico en cualquier proyecto industrial. Y es que este dispositivo resulta fundamental para eliminar desperfectos y conseguir acabados de calidad en trabajos asociados con el sector. Especialmente porque nos permite pulir una multitud de superficies de manera práctica, rápida y eficiente.
La mayoría de estas máquinas operan a 2.500 y 6.800 revoluciones por minuto, característica que las convierten en dispositivos versátiles para pulir bordes o salientes, cortar metales, soltar remaches, redondear ángulos, etcétera, etcétera.
Por eso y más, desentrañar información sobre qué partes forman una pulidora es importante para cualquier trabajador que haga vida en la industria. ¿La razón? Estamos hablando de herramientas que son utilizadas con varios propósitos relacionados con el afilado, bruñido y bordeado de superficies. En este artículo vamos a conocer cómo están compuestas estas máquinas, entre otras cosas.
Descubre qué partes forman una Pulidora
Para descubrir qué partes forman una pulidora debemos destacar que esta herramienta normalmente está compuesta por piezas fijas y móviles. Estas últimas se pueden intercambiar con el paso de los años.
Piezas fijas
Se les conoce como piezas fijas a los componentes que vienen adheridos a la pulidora y, por tanto, forman parte de un mismo conjunto que no es intercambiable o no se puede modificar. En definitiva, resulta imposible alterar estas piezas, independientemente del tipo de trabajo que estemos llevando a cabo.
La carcasa
Está ubicada en el centro de la pulidora y actúa como el corazón de la herramienta, convirtiendo la energía eléctrica o aire comprimido en fuerza centrífuga poniendo en marcha los discos (haciendo que giren). En pocas palabras; la carcasa es el motor de esta clase de herramienta.
Interruptor
Deducir qué partes forman una pulidora es cuestión de lógica, al menos esto sucede al momento de identificar el interruptor. Cualquier persona sabe que este componente tiene la función de encendido y apagado de la herramienta. Usualmente se ubica en la zona lateral del aparato y siempre estará presente cerca de nuestras manos para al momento de querer encender o apagar el equipo nos resulte fácil con el objetivo de evitar posibles accidentes.
El mango
Las pulidoras vienen con dos mangos para sostener la herramienta de forma óptima. Uno en la parte posterior que actúa de soporte y en otro en un costado para direccionar el dispositivo.
Cable de alimentación
Sin corriente es imposible que una pulidora funcione. Por ello, lógicamente integran un cable de alimentación que le proporciona energía eléctrica o una manguera que permita la circulación de aire comprimido. Afortunadamente, en la actualidad ya hay modelos que son inalámbricos y, por supuesto, nos hacen la vida más fácil a la hora de trabajar.
Piezas intercambiables
Al hablar sobre qué partes forman una pulidora no podemos olvidarnos del único elemento que se desgasta en este tipo de herramienta: los discos. Por tanto, son intercambiables.
Discos o almohadilla para pulir
Los discos, almohadillas o bonetes es la pieza que entra en contacto directo con la superficie que vamos a pulir. Suelen venir en distintos tamaños y presentaciones. ¿Lo mejor? Que se pueden intercambiar fácilmente.
Usos de una pulidora
Ahora que sabemos qué partes forman una pulidora y hemos dejado claro que este dispositivo es indispensable en el sector industrial, conviene destacar que también se puede utilizar en el hogar (con potencias más limitadas, claro está). Veamos cuáles son los usos de esta herramienta:
En lo industrial
La pulidora circular suele ser la más utilizada en este sector, pero también existe la de doble rotación que demanda cierta habilidad del trabajador para sacarle provecho. El caso es que ambos se utilizan en el ámbito de los acabados y de los rayones profundos.
Sin embargo, existen ciertos factores importantes que involucran la habilidad del operador. Serían:
- Tanto la pulidora circular como la rotatoria requieren nivel, seguridad y confianza.
- El trabajador debe sostener bien la herramienta para no causar hologramas o ahondar los rayones.
- Un mal uso de la pulidora ocasiona pérdida en el acabado o en la pátina de las superficies.
Una pulidora como la FTX-250 -PT con potencia de 900W es esencial entre las herramientas en el campo de la Obra gris, gracias a que reúne las siguientes características:
- Cuenta con centraje de giro de precisión elevada
- No es muy ruidoso
- Incluye un interruptor de desconexión de seguridad.
- Integra muelas de algodón y protectores incluidos.
En el hogar
Sea una abrillantadora o una herramienta de corte, las pulidoras orientadas a realizar tareas dentro del hogar destacan por ofrecer una utilidad restringida al mantenimiento de acabados o de pátinas.
Sin embargo, los usos pueden extenderse al sector industrial como en el caso de la FTX-200-PM porque es perfecta para trabajos ligeros y profesionales. Sus características son:
- Potencia de 900 W.
- Potencia Hp de 1,22 hp.
- Baja sonoridad.
- Muelas de algodón.
- Protectores.
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Conclusiones
Al final, además de saber qué partes forman una pulidora es importante que los operarios cuenten con ciertas habilidades para manipular la máquina correctamente y conseguir buenos resultados. Por tanto, estas herramientas no trabajan por sí solas, su manejo y uso resulta fundamental para conseguir excelentes acabados.
Lo más positivo es que en Suteva ponemos a vuestro alcance modelos que son de fácil manipulación y garantizan un trabajo de calidad.
Socio fundador y administrador en SUTEVA. Más de 35 años de experiencia en la distribución de herramientas, maquinaria profesional Epis y consumibles para la industria.
Comercio electrónico y marketing digital en EAE Business School.
